Tabú

Amor, lujuria, pasión, lealtad, complicidad…
Aspectos deseados desde la naturaleza humana. Aspectos que, por tradición, no hemos sabido conjugar. Aspectos que, en el ambiente swinger, son necesarios y perfectamente compatibles.
No intentaré decirte que el intercambio de parejas es fácil para todos, o que funcionará igual para ti que para mí. Pero intentaré hablarte desde mi experiencia y con la mayor imparcialidad posible de manera que, al menos por un instante, mis ojos sean los tuyos.
Hacer del swinger un estilo de vida es sencillo, aunque no necesariamente fácil. Parece una simple decisión; en realidad lo es. Parece muy satisfactorio, y lo es. Hay quienes dicen que es de las experiencias más liberadoras que existen; y tienen razón.
Entonces, ¿por qué es tan difícil aceptar nuestros deseos y ejecutarlos a placer? ¿Por qué todavía son muchas las personas que se apegan a sus creencias, pese a no sentir pasión por ellas?
He aquí algunas razones:
– Dificultad para asimilar un cambio tan radical en la manera de concebir nuestra sexualidad.
– Celos o temor a perjudicar la relación.
– Miedo a ser descubiertos por nuestro entorno.
– Dudas sobre los límites establecidos en las fiestas swinger

Razones comprensibles en su totalidad. Sin embargo, como en la vida, en el swinger (casi) todo tiene solución.
– Comprender que la exploración de nuestra sexualidad es un acto perfectamente natural, que no causa perjuicio y, por el contrario, nos brinda múltiples satisfacciones.
– Manejar una buena comunicación con tu pareja y establecer reglas y límites con la mayor claridad posible.
– Entablar contacto con otras parejas en lugares seguros y discretos.
– Indagar sobre las pautas manejadas en la futura reunión, de manera que no se sientan irrespetados u obligados a realizar alguna acción indeseada.
– Aceptar que no estamos solos. Por ejemplo: al Red Club han asistido más de 300 parejas en estos tres años de existencia, lo cual es un claro indicativo de la apertura que están teniendo nuestra sociedad de modo cada vez más común.
Si bien es cierto, se necesita mucha seguridad y confianza en sí mismos, practicar las relaciones swinger representan un acto perfectamente natural en donde se satisfacen los deseos de los participantes, manteniendo siempre la integridad física y moral de cada uno.
Si tienes dudas, contáctame vía whatsapp y estaré encantada de responder tus preguntas.